Last Dance

Lo hemos demostrado y bien. Con actitud, esfuerzo y algún cha cha chá de por medio, el mundo es nuestro.

Soy de las que dice que nada es imposible. Quizás una utopía, posible generador de falsas expectativas, pero para mí, el motor de motivación que nos hace seguir siempre hacia adelante.  Saber que podemos. Mientras seamos conscientes de nuestras limitaciones pero también de todo el espacio que hay para la mejora continua…el mundo es nuestro. Y si algo no lo conseguimos, lo hemos intentado.

Esa es la verdadera actitud ganadora.

Todo un lujo esta inmersión de dos semanas con los Tesoros. Cada uno con sus respectivas mochilas cargadas de un poco de todo: incertidumbre, alguna inseguridad, ganas de retarse, nervios, ilusión, puesta a prueba… pero todos apuntando hacia una misma dirección: vivir una experiencia cargada de aprendizaje del inglés y de la vida misma.

Dos semanas con clases y debates, un no parar de actividades, y unas excursiones chulísimas. Ambiente internacional sin fronteras. Con ese componente británico, lider en educación no solo en materia lingíistica sino en habilidades como el pensamiento crítico, la disciplina, el trabajo en equipo, la creatividad.

Nuestro Last Dance. Escucho el griterío de los alumnos finalizando su Disco de despedida y entrando en sus respectivas residencias. Alegría, Disfrute, Satisfacción.

Gracias queridos padres por la confianza depositada. Id abriendo los brazos que mañana llegamos.

Nuestro último encendido de gusiluz. Preparándonos para cerrar un Folkestone que lo ha dado todo estas dos semanas.

Felices sueños. Sobre todo, felices.