Así nos encontrábamos hoy. La emoción de saber que nos íbamos de excursión, nos hizo pensar que no había clases por la mañana….pero no…las 22.5 horas académicas tienen que repartirse y bien, a lo largo de la semana. Con una motivación extra, nos fuimos a las clases después el desayuno y tras quemarlo todo con nuestra actividad intelectual en las aulas, volvimos a alegrar a nuestros estómagos antes de partir a Turnbridge Wells.

Una reunión previa en el Pabellón deportivo sirvió para trasladar algunas normas del viaje y agrupar a los niños por edades entre juniors y teenagers. Y en un pin pan pún, llegamos en varios autobuses a nuestro destino. Turnbridge Wells iba a ser nuestro. Una localidad típica inglesa, muy típica y elegante. 

Entramos en plancha en el shopping center. Carteras en mano y con sonrisas bien amplias. Nuestros teenagers podían ir en cuchipandi con revisión de tiempo y los juniors con supervisión del monitor todo el rato. Al final, todos nos encontramos en los mismos sitios, cosa que nos alegró. Como si no nos hubiéramos visto en meses. Pusimos en común nuestras compritas y los primeros regalitos. Alguno de nuestros Tesoros, mostró activamente su nueva adquisición.

La segunda parte de la excursión constó de una escapada al parque de la zona, impresionante. Allí comeríamos nuestros Pack Dinner (ensalada de pasta, paquete de papas, chocolatina, agua y pieza de fruta). También hubo quien se zampó 2 hamburguesas, para que nos vamos a engañar.

Un día con temperaturas veraniegas del todo, rodeado de la barbaridad de naturaleza inglesa…tiempo que dedicamos para un «chill out», jugar al béisbol algunos y otros, posar como nadie para el objetivo de servidora.  Y como viene siendo costumbre, me costó Dios y ayuda conseguir hacerme una foto sola con mis 10 perlas. 

Un día muy productivo. Salir del campus y espabilar con la vida real, es otro cantar. Hay que volar. Hemos incorporado nuevas experiencias fuera de nuestra área de confort.

Os regalamos la foto del día. Nuestra Moni, un ejemplo de superación. De crecimiento exponencial.

Gracias queridos padres por facilitarnos ésta oportunidad a todos. 

Felices sueños desde nuestro hogar temporal. Porque en eso se está convirtiendo conforme pasan los días.

Pepa Ferrer- Asesora de IDIOMAS en el extranjero